domingo, junio 22

El fútbol y yo


No me gusta mucho el fútbol, creo que con Limón (auténtico fanático) superé mi cuota de ver partidos, Limón era de esos que les cambia el humor según si su equipo ganaba o no, hasta mi vida sexual dependía de los resultados ligueros.
Yo soy del Real Madrid, por lo menos eso tenía en común con Limón en eso no discutíamos, no soy especialmente hincha pero si quiero que gane algún equipo es ese.
Me he tragado si hago un cálculo rápido más de doscientos partidos de fútbol sala en directo (Limón jugaba) desde campeonatos, maratones, ligas o partidillos entre amigos. Sobre partidos de liga, champions, copa y mundiales, son innumerables los vistos por la tele, y en el campo, en el Bernabeu, al menos dos al año, cuando no eran tres. Todo eso en apenas diez años, con lo cuál me gustara o no, me terminé por conocer los nombres de los jugadores, la alineación de los equipos y los puntos de la liga, hasta sé explicar que es un fuera de juego.
Esta última liga no la he seguido apenas, no sabía cuando se jugaban los partidos, ni contra quien, he estado desconectada, aunque viviendo en este país es imposible que no te enteres como van las cosas, entre otras cosas porque tengo la costumbre de leer periódicos y ver las noticias de la tele.
A Fresa no le gusta especialmente el fútbol, él simpatiza con el Depor (morriña entrañable) y el Barça, pero como no es ningún forofo, casi nunca ve el fútbol para mi felicidad, por lo que yo tampoco tengo que verlo en casa.
La única excepción que hago es el Madrid-Barça y los partidos de la selección, en esos momentos si me sale mi venita futbolera y patriótica respectivamente.
Esta Eurocopa he visto los partidos, aunque no estaba especialmente ilusionada porque no quería ilusionarme como me pasaba otros años, ahora después de esta apurada victoria, porque terminar en penaltis es una victoria, pero te sabe a menos, estoy ilusionándome, sin tirar cohetes, pero no puedo evitar preguntarme eso de ¿y si ganamos? Hay que tener algo de fe.
Por lo menos este año hemos pasado de cuartos, algo histórico, ahora la gente está ilusionándose, pero como fallen la decepción puede ser mayor. Oremos todos al Dios del fútbol, ya que en este mundo de ateos y descreídos lo único que consuela es la Fe en tu equipo o en tu selección, al menos son seres tangibles y si les llamas inútiles o les alabas sin mesura, les puedes poner cara.
Recemos pues por nuestra selección.



P.D. Como vivo detrás de Gran Via, estoy oyendo pasar coches pitando desde aquí, espero que todo se celebre con mesura (ya sé que a veces soy demasiado optimista) porque me tengo que levantar a las seis de la mañana y me gustaría dormir...

3 comentarios:

anselmo dijo...

Ni los penaltys vi ayer...y mi pareja y mi niño estaban gritando como locos delante de la tele

Laura dijo...

A mi tampoco me gusta, ni siquiera vi el partido, aunque eso no quita que me alegre por la victoria. Espero que sigan ganando. Saludos.

BIRA dijo...

Anselmo, eres una cosa rara, tú, pero te queremos igual.

Laura, ni se te ocurra ver los partidos que le faltan a la Selección, ya sabemos que hasta ahora eso nos ha dado suerte.

Caramelo, es triste que tengamos que movernos por los gustos de otro (al menos a mí me lo parece), especialmente cuando no coinciden con los nuestros. Me alegro que con Fresa puedas ser más tú misma, hasta en esto.

Y sí, rezar rezaremos, yo, de hecho, espero que pasen el siguiente partido, y luego ya veremos. Y no, no creo que la decepción sea mayor, porque grandes selecciones han caído antes que la nuestra, y hacía mucho, demasiado, tiempo que no llegábamos tan lejos. Así que, que nos quiten lo bailao!!

Besos.