Yo no tengo la culpa

Semen corriendo por mis piernas. Después de los jadeos, los besos y las caricias compartidas. No me siento sucia por dejarlo resbalar, es el precio de mi amor.
Será verdad que no sé estar sola y prostituyo mi cariño.
Realmente nunca he estado sola, la palabra correcta ha sido abandonada, con un novio en la distancia, tan lejano que me busqué un amante para suplir su cariño.
Es culpa mia que el amante sustituyera al amor.
Estoy con una persona que me quiere tal y como soy y me da todo el cariño del mundo, me dice preciosa...
No debo de sentirme culpable por disfrutar del momento, no debo pensar en las heridas abiertas, no debo seguir soñando despierta.

Yo no tengo la culpa de que la vida se nutra de la virtud y del pecado, de lo hermoso y de lo feo. Benito Pérez Galdos (1843-1920) Escritor español.